100.000 pasos con Cayumas por París

100.000 pasos con Cayumas por París - Cayumas

París bien vale una Misa, según el dicho, y también podríamos decir que París bien vale unas Cayumas. Fin de semana largo en París, sólo chicas. Tres días y medio para redescubrir la Ciudad de la Luz. Una experiencia diferente, en una época diferente.

Ana, Uma y Fernanda con la Torre Eiffel detrás.

Las Cayumas siempre con nosotras, nos llevan en interminables paseos por las calles, por las avenidas. Son las acompañantes perfectas para las largas horas de actividad. Caminamos por la ribera del Sena, escuchamos conciertos callejeros, hojeamos libros en los puestos a la vereda de los puentes, y nos sentimos cómodas, como descalzas, pero protegidas, por la suavidad del terciopelo y la flexibilidad de la suela de las Cayumas.

 

       

 

París está diferente, prácticamente todo está cerrado; no hay restaurantes ni museos, el toque de queda es a las seis de la tarde, pero todo ello le da a la ciudad un halo distinto, misterioso, en cierta forma mágico, como si estuvieras viviendo algo irrepetible, en un sitio que sigue teniendo todo, pero que no está a tu alcance, que lo puedes disfrutar solamente a medias, te deja mirar pero no entrar.

 

Con nuestras Cayumas nos acercamos a la Torre Eiffel, y como siempre nos sorprendemos de la inteligencia humana que permite realizar obras tan fantásticas como esta, igual que, en otra medida, otro lugar y en otra época, en pequeños talleres, habilidosos artesanos, producen con mimo nuestras Cayumas.

 

Cada día, vuelta al hotel, un buen baño y a descansar, para prepararnos para el siguiente, que nos llevará a otros recorridos, otros monumentos y otras experiencias, siempre, eso si, acompañados por las Cayumas, nuestras fieles amigas y acompañantes en esta pequeña aventura en París.

 

A bientôt Paris!